domingo, 14 de noviembre de 2010

Fundamental creencia (1956)

En el principio fue el verbo, y puede que en el fin sea el verbo también, pero pasamos por un
mundo palpable donde nuestro sueño es tactil.
La palabra, esencia misma de la cosa, ha sido prostituida por los hombres que la han convertido en máscara de sus intenciones. A nosotros concretamente, se nos acabó con su pureza nuestro imperio. Los pueblos que hoy mandan son los que tienen por principio la acción y no el verbo. Precisamente ellos, jugando con las palabras en sus desorbitados slogans de conquista, hicieron un profundo impacto en nuestra diferente mentalidad y la Castilla de las paraulas en cristiano ha terminado prácticamente enmudeciendo ante la carrera desenfrenada de real perversión de nuestro lenguaje popular emprendida por extraños altoparlantes reclamistas a sueldo, secundados por españoles enfáticos, estafadores insensatos.
Hemos roto el divino espejo de la verdad y tenemos que acudir a la percepción del movimiento inconsciente humano espejo de la verdad. 
El fonema y el cinema disponen de este espejo. 
El reportaje en televisión lo utiliza plenamente. 
Tras la verdad palpable, hoy nos adentramos más y más en un profundo sueño tactil.

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